Toda la villa estuvo rodeada de murallas que descendían desde los extremos del castillo. De ellas, sólo se conservan cuatro cubos, dos al sur y dos al norte, y diferentes paños. Además del castillo, el edificio más importante de Peñafiel es la iglesia de San Pablo, fundada en 1324 por el infante don Juan Manuel, que constituye el mejor ejemplo vallisoletano del estilo gótico-mudéjar. En su interior sobresale la capilla funeraria de los Manuel, adornada con elementos platerescos.