La plaza vieja, la iglesia parroquial y algunas casas del centro de la villa son una excelente muestra de arquitectura popular del siglo XVIII. El resto de los edificios notables corresponden a finales del siglo XIX y principios del XX, época en la que Comillas gozó de su máximo esplendor económico y social favorecido por la iniciativa de Antonio López y López, indiano emigrante a Cuba y fundador de la gran compañía naviera "La Trasatlántica". Su poder financiero y su amistad con la Corona le valieron el título de primer marqués de Comillas, título que le otorgó Alfonso XII en 1882.
Una de las cosas más relajantes y salutíferas es caminar por la orilla del mar, por donde se conjuntan agua y tierra, mientras respiras la limpia brisa. Nada mejor para el cuerpo y el espíritu.
En Gijón existe uno de estos senderos que se pueden transitar cómodamente y que te permiten contemplar el Cantábrico hasta el horizonte, las playas y los acantilados de la costa y los innumerables hitos que a lo largo del recorrido puedes encontrar.
Podemos comenzar desde la puerta de la iglesia de San Pedro en el barrio de Cimadevilla, al pie del magnífico Cerro de Santa Catalina; recorrer la gran playa de San Lorenzo; puentear el Piles; contemplar las extrañas esculturas de Chillida; poner la vista a lo lejos con La Madre del Emigrante, sobre los mayanes, en el parque del Rinconín; estremecerse al paso de la casa de Rosario Acuña y de los restos del Castillo de Salas; mirar en el cielo las evoluciones de los parapentes por la Peñarrubia; expandir la mirada desde el estilizado barco del mirador del parque de La Providencia, y recibir en la cara el aire húmedo del cabo de San Lorenzo.