Antiguamente habitada por thamudis y nabateos, Mada’in Saleh es el primer sitio de lo que hoy es Arabia Saudí, inscripto como Patrimonio de la Humanidad. Todos sus rasgos arquitectónicos poseen de hecho el estilo de Petra, y no falta hasta una grieta natural que remite a su ciudad hermana, aunque de menores dimensiones. Emplazada en medio del desierto, emergen unas gigantescas rocas utilizadas para emplazar la ciudad, donde no faltan palacios tallados, templos y grandes tumbas en toda el área, obras que pueden tener hasta 16 metros de altura. Incluso, los restas de la ciudad se ven hasta mejor conservados que los de Petra
Dandome una vuelta por el Campo Ghawar me he encontrado este palacete, parece ser que es un regalo de Arabia Saudita al rey de Bahrein, una de sus esposas parece ser que es de la vecina localidad de Uray'irah.
Me imagino que le habrá parecido poco. Lo curioso es cuando lo comparas con el terreno circundante