El pasado viernes los islamistas radicales perpetraron una nueva matanza en la playa del Hotel Riu Imperial Marhaba -Port el Kantaoui- Tunez. El saldo ha sido de 38 muertos, aunque hay numerosos heridos y es posible que la cifra aumente en los próximos días.
El atentado no solo va contra los turistas, sino que es un torpedo en la línea de flotación del turismo en Túnez, el único país del norte de Africa donde la revolución democrática triunfó.