Beget, provincia de Girona tiene sus orígenes en plena Edad Media y se sabe de su existencia como parroquia al menos desde 1168. Durante siglos la vida giró en torno a la Iglesia de Sant Cristòfol de Beget (s.X-XIII), y aún hoy en día es su principal icono. En otros tiempos el término municipal de Beget abarcó las poblaciones de Rocabruna, Bestracà y Salarsa. En su máximo apogeo (finales del s.XIX), Beget llegó a tener más de 1.300 habitantes, una cifra impactante teniendo en cuenta que hoy están censadas poco más de 20 personas.
Si algún día hacemos una lista de los pueblos más bonitos de Cataluña (algo que no descarto, por cierto), seguro que incluiremos Beget entre los cinco primeros. Es un pueblo muy pequeño y de acceso relativamente complicado, y quizá por culpa de eso o gracias a eso pasa bastante desapercibido entre los turistas.