El árbol que da estas bonitas flores es nativo de China y desde los tiempos de la dinastía Ming un sitio concentra una gran cantidad de estos arboles y por ende cuando florecen se convierte en un destino aromático 100%. Estoy hablando de la aldea de Manjuelong, en Hangzhou. La temporada de otoño del árbol es entre fines de septiembre y comienzos de octubre y es cuando aparecen las flores, pequeñas, de color amarillo brillante y sumamente fragantes. Impregnan el aire y por ocasiones es como que lo hacen más denso.
Uno de los aromas típicos de varios rincones de China es el de las flores de Osmanto. Tienen un aroma encantador y fuerte y lo hueles en las calles, a la vera de ríos, canales y lagos. Las flores son pequeñas al lado de las ramas y aunque pequeñas y difíciles de distinguir en la lejanía es la nariz la primera que da con ellas. Es común querer tomarles una foto pero lo cierto es que cuesta porque son bien pequeñas así que hay que tener paciencia y usar la función micro de la cámara digital.