Aún quedan lugares capaces de sorprender al más viajado y el Monasterio del Nido del Tigre es uno de ellos. Conocido entre los locales como Taktsang Palphug hablamos de un templo budista que se encuentra literalmente colgado sobre un lateral de una pared vertical. Una maravilla visual si me preguntas a mi. Por lo general, la mayoría de las agencias que organizan la visita a Bután incluyen un día para caminar hasta y desde el monasterio. En una suerte de final feliz lo organizan perfectamente para que el visitante se lleve la mejor de las impresiones de este pequeño país perdido en los Himalayas.
A unos 3.000 metros de altura se encuentra ubicado este rincón religioso al que solo es posible llegar a pie o lomo de mula. Muchos turistas dicen; que para que un viaje a Butan este complejo es necesario subir hasta el Taktsang, desde el cual el viajero sale alimentado espiritualmente y lleno de felicidad.
Localizado hacia el norte de la población de Paro, en lo alto de un acantilado, surge el famoso Monasterio Taktsang, también conocido “Nido del Tigre”.
Sus orígenes de remontan al siglo XVII, cuando el gurú indio Padmasambhava o Guru Rinpoche, llegó a Bután trayendo el budismo y estableciendo un número de templos y monasterios, incluido el monasterio Taktshang construido en lo alto de un risco en el distrito de Bumthang.