En él, los habitantes del entonces presidio de Ushuaia,eran trasladados hacia los campamentos donde cumplían penas de trabajos forzados. El ferrocarril, de trocha angosta, es propulsado por locomotoras a vapor; y cuenta en la actualidad con coches elegantemente decorados.
Serpenteando el Río Pipo, el tren continúa atravesando sectores que muestran la huella que fueron dejando los presos en su rutina diaria de cortar árboles durante casi medio siglo de labor ininterrumpida
Hoy,junto con el penal es una de las grandes atracciones turisticas de Tierra del Fuego.