Calella de Palafrugell, Girona, Catalunya
Resulta imposible empezar este viaje por Calella de Palafrugell, la que es la niña mimada de la Costa Brava, sin nombrar a Josep Pla, su hijo predilecto, escritor y periodista, y quien mejor supo describir la totalidad de su belleza (usted me perdone, señor Pla, si es que me está leyendo desde alguna parte del universo). Y volviendo a sus letras, al Quadern Gris de 1966 y a la Guía de la Costa Brava de 1941, una se da cuenta que los pequeños placeres de la vida por mucho que pase el tiempo siguen siendo los mismos. Calella de Palafrugell es simétrica, perfecta, agotadoramente bonita e irremediablemente seductora.