Es muy destacable su Iglesia de San Pedro, en la que podremos ver varios enterramientos o sus altares de diferentes estilos: renacentista, barroco y neoclásico. Sobresalen también diversas piezas de orfebrería, de gran valor, y su órgano, que data del año 1803.
Los alrededores de la localidad guardan parajes de gran encanto, como el río de la Hoz, y en las proximidades podremos ver espacios protegidos tan impresionantes como el Parque del Hayedo de Tejera Negra.