Aprovechando la mejora de la imágenes de esta zona, he subido una foto actualizada de La quebrada desde la que se lanzan los clavadistas, junto al hotel el Mirador de Acapulco.
Por muchos años, en La Quebrada, muchos clavadistas han ofrecido el espectáculo de sus clavados desde un acantilado de 45 metros hacia una pequeña y escarpada ensenada del Océano Pacífico
Desde mediados de los 40 este ha sido un sello característico de Acapulco. Todos los días por las tardes y noches, algunos clavadistas realizan este increíble espectáculo.
Desde trepar el acantilado hasta la oración a la Virgen de Guadalupe en su altar sobre el acantilado, antes del salto... todo se realiza como parte de una tradición. Los clavadistas más experimentados saltan desde 45 metros de altura. El truco del clavadista consiste en sincronizar su salto con una ola para garantizar que habrá suficiente agua debajo porque la ensenada tiene escasos 4 metros de profundidad !!!. Esto es más difícil de lo que uno pudiera pensar, deben tomar en consideración el tiempo de caída, la velocidad del viento y la altura de la ola.