Los constantes ataques por parte de los moros y normandos conduce a la necesidad de construir una fortaleza para custodia y defensa de los monjes y de la comunidad cristiana que vivían a su alrededor. Surge así el primitivo Castillo de Guimarães.
Castelo de Vide es un pueblo fronterizo con encanto, enclavado en el Alentejo y que forma parte de la línea defensiva portuguesa con Castilla. Colgado sobre las montañas de la Sierra de Mamene, con unas impresionantes vistas panorámicas sobre Extremadura.
El pueblo destaca por su arquitectura tradicional, su castillo, poderosa fortaleza, y varias de sus iglesias.